"…Después vinieron las masacres de Aguas Blancas y Acteal, y no hice nada porque no era zapatista, ni campesino. Después vino la represión en Cancún, Guadalajara y Atenco, y no hice nada porque no era altermundista, globalifóbico ni comunero. Después llego la PFP a Oaxaca y no hice nada porque no era oaxaqueño. Después mataron a más de cuarenta mil personas entre narcos, sicarios, soldados, policías y miles de inocentes y yo no hice nada porque me paralizó el miedo. Después vinieron por mí, y para ese momento ya no quedaba nadie que pudiera hacer algo por mí."

Frase reeditada a la mexicana por su servilleta, se le atribuye erróneamente a Bertolt Brecht en realidad la dijo/escribió (¿?) Martin Niemoeller.

martes, 15 de marzo de 2016

El sentido de la vida



Eso de buscarle sentido a la vida se me hace que es un sinsentido: lxs ignorantes son felices, lxs pendejxs ríen, lxs me vales la disfrutan, lxs egoístas la pasan chido agandayando al resto… Al final de cuentas si no hay a quien rendir cuentas, no le encuentro sentido al asunto de ser buena gente, pero luego me acuerdo de Dewie, su pala y las hormigas y, entonces me surgen más luegos.

Luego, la cuestión de la vida es disfrutarla, luego, en este sistema para disfrutar se requiere que sea a costa de los demás, luego, si es a costa de los demás se necesita que sea con engaños, luego, si se ocupan engaños tienen que ser creíbles, luego, para que sean creíbles pues la mentira tiene que ser deseable, luego… surge Dios y se explota el miedo a la muerte, luego, se cosechan las ganancias de las religiones, luego, la gente piensa que se porta bien por el miedo a Dios, luego, la mentira funciona bien… para los gandayas, no tanto para lxs que caen en el asunto, pero la idea se mantiene, muta, se transforma, se hace un rollo independiente desde el cual de vez en cuando salen ideas nuevas. Nociones de vida que permiten vivir y convivir, aunque surjan de una mentira, pues la fuerza de quienes la viven  la convierte en mentira a medias, que no verdad a medias, pero que puede resultar útil en momentos determinados   y así se perpetua un juego de gatos y ratones entre gandayas y agandayados y así. Y aunque pudiéramos pensar que entonces la vida se trata de una competencia entre naturalezas, humores, individualidades, entre buenos y malos pues no. Eso resulta ser la basurita, los sobrantes, lo que esta demás del juego que ni a juego llega.


Al final de cuentas, se me hace que no hay que encontrarle mayor sentido a la vida que el de vivirla masomenos como la epifanía de Dewie, siendo congruentes, sin joder, y agregaría: pero tampoco dejar que nos jodan, sin  agandayes y, si el sistema contribuye al agandaye, pues poner nuestro chingadazo (no granito), de arena para acabar con eso, para que sea un poco más vivible la vida. En una de esas y es precisamente ahí cuando alcanzamos nuestro pedacito de paraíso y encontramos sentido a nuestra existencia.


https://www.youtube.com/watch?v=tmhdbQlTFtI


jueves, 3 de marzo de 2016

Del trio tabú: política, religión y futbol



De sentires libertario, que no liberal, ni es lo mismo y aunque suene parecido, políticamente hablando no es igual.

Ateo, sin bautizo y a mucha honra. Aunque de repente me llega a seducir alguna tarugada, creo que antes sería  politeísta ecléctico, animista y reencarnativo, que adepto a una religión, pero no: hasta ahora ateo felizmente resignado a dejar de existir en unos años.

Eso sí, creo en el paraíso y el mío incluye una hamaca, playa, cerveza, reggae de fondo y una novela chida.

Y de futbol pues no hablo porque no me gusta y aunque pudiera decir “pero que chingue su madre el América” igual mandaría a la chingada a algunos equipos más.




De gustos y disgustos



Me gustan los cigarros sin filtro, el mezcal, la cerveza obscura y el café expreso sin azúcar. Me gusta viajar pero no me gustan los hoteles. Me gusta  la gente sincera, de mente abierta y entre más rara mejor. Por cierto también me gusta la gente con el pelo azul, ah y el blues.

No me gusta preguntar,  porque no me gusta que me mientan y me gustan y disgustan muchas cosas, pero la tinta es finita y nuestras paciencias aún más.


lunes, 22 de febrero de 2016

En defensa de la Obscuridad




Por el derecho a la B, que sería de la obscuridad sin la B, que sería de esa bella palabra sin la B, una simple y banal oscuridad. Si, vale, el asunto radica en el uso más que en lo estético o en la sonoridad. Pues wueno a esa gente que le suena bien oscuridad y que piensa que la B esta demás  les diré  solamente que ojetan sin sentido y que no ostante pueden irse al cuerno con sus asolutos, por ser ostinados y por su falta de oservación, y a pesar de los ostaculos, en lo personal seguiré por el lado obscuro y por qué, pues porque suena más onito, he dicho.

Lo bueno de lo malo y al revés volteado




Lo bueno que tiene lo malo; es que en las malas sabes con quien en verdad cuentas. Lo malo que tiene lo bueno que tiene eso malo; es que son pocas las personas con las que en las malas cuentas. Ora… lo bueno que tiene lo malo de lo bueno que tiene lo malo del principio; es que es bueno saber con quién puedes contar (aunque esas personas se cuenten con los dedos de una mano), si no hubiera días malos no sabrías quienes son las amistades buenas, en síntesis el asunto es muy sencillo.





lunes, 23 de noviembre de 2015

Nuestros odios, sus dividendos



Me pareció bastante bueno el texto, hace unos días platicaba con un buen amigo la facilidad con la que puede surgir la palabra odio en  una discusión sobre la situación política en nuestro país. Y de verdad resulta fácil que emerja ese sentimiento, nomás basta un breve recuento del tipo: carestía, inflación, corrupción, violencia, fraudes, abuso de autoridad, masacres, tortura, desapariciones  y podríamos seguir de largo, pero wueno, no se trata de eso.

La cuestión es que el odio le viene bien a quienes detentan el poder, el odio de los de abajo, siempre y cuando se mantenga entre los de abajo. Porque los de arriba, ora sí parafraseando  una obra de teatro chafa de hace unos años “entre ellos podrán despedazarse pero jamás se harán daño”. Tonces a ellos pues claro que les viene bien que no trabajemos juntos, les viene bien que no lleguemos a  acuerdos, les viene bien que no nos solidaricemos con las luchas de otros grupos o gremios, y por supuesto les viene bien el odio.

Siembran miedos para cosechar odios, nos señalaba hace tiempo Chomsky, lo incitan, lo convierten en un bien de mercado, en un producto comprable, no lo dan en oferta y nosotros lo adquirimos hasta gustosos. Seguido plagado de afirmaciones que aluden a una supuesta naturaleza violenta de los seres humanos, otras con afirmaciones bastante superficiales sobre fundamentalismos religiosos. En el caso mexicano, escuchamos que se padece de una especie de condición intrínseca, algo así como una “identidad nacional”, que incluye una predisposición a la corrupción, al agandalle, a ser flojos, etc. 

Total que la realidad de los de abajo está determinada por su propia “naturaleza”, las condiciones de miseria, despojo, insolvencia y un largo etcétera es resultado de ellos mismos, y en últimas y muy esporádicas ocasiones, de quienes nos gobiernan o detentan el poder.  Y para que todo eso funcione para los de arriba hace falta por supuesto un factor de enemistad y enajenamiento entre los de abajo, por eso es que el odio les viene muy bien.
Puso una amiga hace unos días una frase bastante certera: “Sus guerras, nuestros muertos”

Wueno dejo la nota, que se me hizo chida aquí abajo.

http://internacional.elpais.com/internacional/2015/11/22/actualidad/1448197811_493273.html


jueves, 8 de octubre de 2015

Bronce inmortal



Algún día seremos un recuerdo y no mucho después,  todo aquel que pudiera recordarnos también habrá muerto.

Ahora bien en caso de que alguien se encandile en ilusiones de fama, grandeza o inmortalidad y alcanzara algo de eso,  debería tomar en cuenta que por más profunda que pudiera ser su huella en la historia las generaciones siguientes, en el mejor de los casos, fundirían su recuerdo, lo inmortalizarían en bronce y lo colocarían en una plaza para que, invariablemente,  algún tiempo después su solemne figura se gane una aureola grisácea cortesía de las aves.

Moraleja: Sueños de inmortalidad y aspiraciones de grandeza pueden ser coronados con mierda de paloma.





jueves, 24 de septiembre de 2015

Frases suicidas 1



Ya no puedo vivir en este mundo, mejor me trago una Macdonals y que los vivos olviden mi historia...



Los cínicos no sirven para soñar



Decía Kapuscinski refiriéndose al periodismo “Los cínicos no sirven para este oficio”, lo creo cierto y aplicable no sólo al periodismo, aplicable en historia, en ciencias políticas y en general en las ciencias sociales y también, por qué no, en la vida diaria.

Se nos machaca a diario y desde todos los frentes una supuesta irracionalidad cuando tratamos de pensar en un mundo mejor, mientras se nos presenta una realidad inamovible donde los salarios cada vez alcanzan para menos, las prestaciones de ley cada vez son más ridículas. Una realidad que no podemos cambiar, donde resulta del todo legal y racional que el patrón te despida después de diez años porque no quiere que el empleado genere antigüedad. Nos enfrentamos así a un cinismo con tintes racionalistas donde los amos explican en términos accesibles porque las próximas generaciones no tendremos acceso a una jubilación digna, para que ellos tengan siempre mayores ganancias bajo el discurso de que puedan invertir más y generar más empleos, sin decir jamás que se trata de subempleos, macjobs, doble turno en wallmart, etc.

Ante esto se nos pide,  de la manera más cínica, que nos convirtamos en cínicxs. Puesto que vivimos en un mundo que no podemos cambiar; se debe votar por el partido que va a ganar y se trata de sacar el mayor provecho posible de la situación, si te mueves no sales en la foto.  Es así y nada podemos hacer, al menos eso es lo que pretenden que creamos y se comportan en consecuencia. El problema es que a su vez, nosotrxs como borreguitxs nos comportamos también en consecuencia.
Quien busque otro camino se vuelve idealista, irracional o utópico  en el mejor de los casos.
Y es que a veces caemos en el engaño de la superioridad del Estado, es su invencibilidad, en victorias que no son, que nunca han sido. Y es cuando caemos en la falsedad de las victorias del Estado, cuando las creemos, que perdemos. Puesto que  olvidamos que nunca se trató de un juego limpio y limpias nunca han sido sus disque victorias.

En el inter de la supremacía del Estado, éste, que no es más que la cúpula del poder, ricos, funcionarios, narcotraficantes, empresarios y sus sirvientes, continúan con el despojo. Ya no se trata de caciques,  ni  terratenientes o al menos ya no se les llama así, ahora viene el narco, más silencioso pero también más sanguinario, vienen las compañías mineras que casualmente o más bien precisamente hicieron del Mineral de Dolores uno de sus nidos mejor encaminado, vienen las compañías del fracking a hacer aquí lo que ya les empiezan a prohibir en Estados Unidos, y ahí van depredando los recursos naturales de nuestro territorio a cambio de empleos temporales y riesgosos y seguirán exprimiéndonos más horas de trabajo y de sueño, mientras sigamos pensando que es así y que nada puede hacerse.
Bonito cuento para antes de dormir, y después llevarnos al matadero.